Lunes 12 de noviembre de 2018, murió a los 95 años Stan Lee, guionista de cómics y co-creador de héroes Marvel como Iron Man, Spider-Man, los Cuatro Fantásticos o los X-Men. Junto con otros miembros de la Casa de las Ideas como Jack Kirby o Steve Ditko, Lee reformó el mundo de los cómics con súper-héroes que, lejos de parecer dioses distantes, tenían los mismos problemas y complejidades que sus lectores de todas las edades, culturas y razas.
Al estar al cargo de múltiples cómics a la vez, Stan Lee también fue conocido por crear un universo comiquero coherente en el que Spider-Man podía ir a buscar “trabajo” con los Cuatro Fantásticos o en el que Los Vengadores eran invitados a la boda de alguno de los miembros de los X-Men. El famoso Universo Cinematográfico Marvel se inspira en esta idea, que ha llegado a su cénit con Los Vengadores: Infinity War.
La génesis de todos estos personajes es digna de una historia Marvelita. En sus inicios como guionista, Stan Lee se centró en cómics sobre misterios, cowboys y sí, algún que otro cruzado enmascarado. Pero tanto el mercado de cómics como el propio Lee se estaban quemando con los mismos temas de siempre.
Stan Lee comentó este problema a su mujer, Joan B. Lee. La respuesta de esta fue su momento “Todo poder conllevar una gran responsabilidad”:“Haz lo que te apetezca hacer, Stan Lee”. Y fue así cómo nacieron Los Cuatro Fantásticos, también conocidos como La Primera Familia porque eran amigos y familia antes que héroes. En ese sentido fue sorprendente verlos pelear entre ellos con casi mayor frecuencia que con El Hombre Topo, Dr. Doom y el resto de villanos.
Su carácter jovial, su imaginación y sus aventuras en donde el ser diferente a los demás era un poder en lugar de una lacra, ha provocado que millones de personas lamenten su muerte y a la vez se muestren agradecidos por todo lo que logró en el mundo del entretenimiento.
