Lali Espósito es una de las figuras de Argentina más querida por sus fanáticos. Es que, su paso por las novelas de Cris Morena y su actualidad musical trascendieron generaciones y la aceptación y fanatismo por ella es casi unánime.
Pero nada sería de ella, probablemente, sin el empuje de sus padres a lo largo de toda su vida. María José Riera, su madre, es tendencia durante la semana por criticar los larguísimos cortes comerciales durante la emisión de La Voz Argentina, donde su hija es jurado.
Poco se ha hablado de su padre, Carlos Romualdo Espósito, quien tiene una profesión para nada relacionada con el mundo del espectáculo y la música. Mientras su esposa se dedica a la producción y al arte, él es entrenador de fútbol de juveniles.
Carly, como lo llaman cariñosamente, era muy buen jugador en su juventud, a pesar de que señale a su hijo Pato como “el mejor de los Espósito” con la redonda. Fanático de Independiente, se cuenta que el papá de Lali es leal, compañero, derecho, apasionado y muy buen consejero.
Su sobrino Santiago Riera juega en Mitre de Santiago del Estero, en la Primera Nacional. Su pasión por el fútbol, más allá de su fanatismo por el Rojo, hace que lo siga y aliente en cada minuto que le toca disputar.
